miércoles, 25 de marzo de 2015

Violencia en Contra de las Mujeres



Gilda Luongo
Miércoles, Diciembre 11, 2013 - 10:00



Desde mi perspectiva feminista, la violencia hacia las mujeres ha ocurrido siempre en un registro socio-cultural-económico muy amplio en nuestros contextos latinoamericanos. No sólo es violencia el hecho de que seamos abusadas sexualmente o experimentemos violencia física/psicológica en  el ámbito privado/público (de esto es lo que más se habla en los medios de comunicación en el tono de crímenes pasionales). Tiene que ver directamente con la construcción de este sistema androcéntrico, heterosexual, patriarcal /capitalista hegemónico  depredador. Este sistema, así construido, constituye una exacta violencia hacia lo femenino diverso (indígenas, proletarias, negras, campesinas, profesionales, obreras, trabajadoras de lo doméstico, trabajadoras sexuales, jóvenes,  niñas, ancianas, lesbianas, bisexuales, transexuales, raras).  Las mujeres en el transcurso de la historia de nuestro continente hemos ocupado un sitio menoscabado en lo social, sometidas al yugo de los patriarcas, hombres blancos, -propietarios-, que nos han arrojado al lugar de mercancía o de objetos de intercambio entre los iguales varones. Han sido los hombres poderosos, léase gobernadores, patrones, terratenientes, oligarcas, burgueses, prebendados, generales, oidores (y los subyugados que establecen pactos entre varones olvidando las asimetrías de clase o de etnia) quienes han sustentado este territorio binario de lo femenino/masculino asimétrico. Luego, hay una responsabilidad que nos cruza a todos y a todas respecto  del derrumbe y la transformación de esa construcción hegemónica de lo masculino dominador. Nunca será suficiente enunciar este absurdo perverso que tiene su correspondencia silenciosa y fuerte con nuestros registros intra-psíquicos. Viene a mi memoria el poema Redondillas de Sor Juana Inés de la Cruz escrito en el siglo XVII: “Hombres necios que acusáis/a la mujer sin razón/sin ver que sois la ocasión/de lo mismo que culpáis”. Esta es nuestra historia
continental. La violencia se hace pasado en la explotación de las mujeres: conquista, colonialismo, sometimiento, esclavitud, mestizaje, blanqueamiento de nuestras manchas en la piel. Por ello es memoria y  es presente en tanto las cuestiones de la injusticia social-cultural tardan muchísimo en su transformación y cobran tintes camaleónicos según los tonos hegemónicos vigentes. Sabemos, aimismo, que cuando creemos avanzar en nuestras luchas feministas, se encuentra pulsando, soterrada, la posibilidad de involución que no siempre podemos contener (la cuestión del aborto en Chile, por ejemplo). Nunca será suficiente la lucha feminista para denunciar y cambiar este modo de relación social heterosexual/patriarcal/capitalista que cruza la diferencia sexual.  Hoy se vende un imaginario exitista respecto de que las mujeres lo hemos logrado “TODO” (¡¡¡una presidenta en el pasado reciente y hoy, dos candidatas a la presidencia!!!). Sin embargo, la gran mayoría somos empleadas en trabajos precarios, mal remunerados/ menos remunerados que los hombres en igualdad de desempeño; pesa  aun en nuestros hombros la carga de lo doméstico, por lo tanto la doble jornada es una realidad cotidiana; llegamos a viejas con una jubilación de lástima; somos las responsables de cuidar a los enfermos y atender a l@s viej@s y desvalid@s. Encargadas aún de la producción afectivo-sexual (¡dicen que es por naturaleza!), la maternidad pareciera ser un estigma carcelario dado que es ilegal  que nos concibamos sujetos deseantes de la maternidad y, en consecuencia, afirmemos  que podemos optar libremente por vivir o no dicha experiencia. En síntesis, cualquier atentado contra nuestras libertades para constituirnos sujetos  autónomos y libres, incardinados por la diferencia sexual constituye, desde mi mirada crítica feminista, una VIOLENCIA en contra de las mujeres. Afirmo rotunda que  este sistema sexo-género heterosexual capitalista y patriarcal actual saca rédito de ella. En consecuencia, todos los días son, desde mi mirada crítica feminista, laboriosidad estratégica  y resistencia en contra de dicha violencia.

San Miguel

19-20 de noviembre, 2013


jueves, 19 de febrero de 2015

GENERO Y VIOLENCIA DE GENERO


Para comenzar a entender la violencia de género debemos diferenciar el significado de sexo y género.

Sexo masculino o femenino, se refiere a las diferencias biológicas que tenemos hombres y mujeres, expresadas por ejemplo en una genitalidad y corporalidad diferente.

Es decir el genero es construido por nosotros, y por medio de este atribuimos como se deben comportar hombres y mujeres, es decir los roles que asumimos. Ejemplo las mujeres deben preocuparse de los hijos y las tareas domésticas, los hombres de trabajar y ser proveedores.

También se van formando estereotipos, es decir características adjudicadas a hombres y mujeres ejemplo: las mujeres son mas sumisas, los hombres más agresivos. Las mujeres son mas emocionales, los hombres mas racionales etc.

 “cuando se subordina el genero femenino, que es lo que pasa en las mayorias de las sociedades, incluida la nuestra, se le llama sistema patriarcal o machismo, lo que nos impone roles, espacios y atributos diferentes para hombres y mujeres. Es decir el hombre es dueño del control y poder”.

¿Que puede generar esto?.

Esto va generando inequidades  y sometimiento por el solo hecho de pertenecer a cierto género…

¿Que pasaría entonces si el género femenino estuviera por sobre el masculino?. Seria mas de lo mismo, estaríamos en una sociedad donde prevalecería el sometimiento y el control, por lo tanto, no existiría el respeto por el otro.

La primera misión como monitores es... Promover la equidad de género es decir realizar acciones  contrarrestando los mecanismos que generan la desigualdad, ejemplo: promover y actuar directamente en el acceso de las mujeres a la información sobre sus derechos, deberes y oportunidades. Contribuir a hacer más igualitarias las relaciones entre los géneros, comenzando con la crianza de nuestros hijos.

La igualdad de genero apunta a que todos los hombres y mujeres deben tener las mismas oportunidades  y derechos. La igualdad de genero admite diferencias pero no desigualdades

Hay que decir si a la igualdad (equidad) entre hombres y mujeres porque es justa y un derecho.

Y no a la desigualdad, porque esta solo promueve violencia y sometimiento. A parte de ser una violación a los derechos de las personas.

Esto no quiere decir que no tenemos diferencias biológicas, pero esas diferencias no pueden llevar a atropellos a nuestros derechos fundamentales.

El problema de la violencia hacia las mujeres.

La violencia contra la mujer no se limita a una región o un país, ni a determinados grupos de mujeres dentro de una sociedad. La violencia de género es una realidad que afecta a todos los países, y en chile, la viven de manera cotidiana muchas mujeres, niñas y adolescentes. Ello repercute en daños personales de las víctimas, en el deterioro de la sociedad, en la vulneración de los principios de igualdad, justicia  y democracia.

¿Qué es la violencia contra las mujeres?.

Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública o privada

La violencia de género tiene que ver con “la violencia que se ejerce hacia las mujeres por el hecho de serlo”, e incluye tanto malos tratos de la pareja, como agresiones físicas o sexuales de extraños, mutilación genital, infanticidios femeninos, acoso sexual en el trabajo, trafico de mujeres y niñas entre otras. La violencia de género es la primera causa de muerte entre las mujeres de 15 a 44 años por encima de guerras, accidentes de tráfico  o el cáncer.

Estas conductas y actitudes, a través de las cuales se expresa la violencia de género, intentan perpetuar el sistema desigual impuesto por la cultura machista y acentuar las diferencias que la sociedad impone a hombres y mujeres, en donde lo masculino esta por sobre lo femenino.

Una de las formas de violencia de género más comunes y más desbastadoras se da en el espacio doméstico, es decir la violencia de pareja.

¿Qué hacer entonces?.  Si el maltrato y la violencia son modos culturales de convivir, sólo pueden desaparecer desde un cambio cultural. Y ese es nuestro trabajo……

¿Cuál es la reflexión que abre la posibilidad del cambio cultural?.



La consciencia del propio dolor abre el ver y el hacer. Por esto debemos fomentar el respeto, la tolerancia a la diversidad y las relaciones donde se vea al otro como legitimo.

No estamos predeterminados genéticamente a ser ninguna clase particular de ser humano.

Todos los seres humanos podemos llegar a “ser” cualquier clase de ser humano según el convivir que vivamos.

POR QUE SE ACEPTA EL MALTRATO

Algunas de las causas por las cuales la mujer permite el maltrato

Si considerando el ciclo de la violencia nos seguimos preguntando…

¿Porque la mujer permite el maltrato?

Esto se puede deber también a factores psicológicos y culturales

Estos pensamientos nos alejan cada vez más de salir de la violencia, es esta la forma en que se nos ha educado culturalmente, es lo que los estereotipos nos dicen:

Hay que aguantar", "la mujer tiene que sacrificarse por mantener a su familia unida", "cada uno tiene su cruz", estas son frases que hemos  escuchado ya sea de nuestras familias, amigas o de algún representante de la iglesia. A las mujeres se les ha educado para "soportar" para sublimar sus deseos y necesidades en pro de los demás. Han aprendido que la entrega ha de ser incondicional aunque en ello nos vaya la felicidad y en -algunos casos- la vida.

Muchas veces las cosas no salen como pensamos. Pero todos merecemos rehacer nuestras vidas, la esencia de nuestra dignidad radica en la confianza que tenemos en si mismos, aun cuando el resto dude.

Cuando te enamoras piensas que es para toda la vida y pones todo tu empeño en que así sea, por eso, una separación supone, por lo general un fracaso para la mujer ya que ella ha tratado de dar lo mejor de sí en esa relación, lo que sucede es que al convivir con un maltratador todo lo que habías imaginado de hermoso de una relación se convierte en un infierno cuya única salida es buscar ayuda.

A veces por como las mujeres han sido criadas  piensan que un hijo debe tener un padre, aunque éste sea el peor de los padres. Todavía se nos impone que la familia "convencional" debe conservarse a toda costa, que es la mejor estructura para el desarrollo adecuado de los hijos. Por eso, muchas mujeres son capaces de sacrificarse, de anularse con tal de que sus hijos tengan este tipo de "hogar", pero no se dan cuenta de cuanto dolor se ahorrarían ellas y sus hijos si comenzarán una nueva vida lejos de su agresor

Al casarse o al tener una pareja, muchas mujeres dejan su vida propia, amistades, e incluso trabajo, etc., para abocarse a los proyectos de su pareja, a las amistades de éste haciendo que se reduzca su vida al mundo de él. Así, la mujer, se ve aislada, sin contactos, sin amistades, sin apoyos que la ayuden a salir de la infernal situación en la que se encuentra.

Hay que quitarse las vendas de los ojos y aprender que el amor nunca puede dañar.

"las cosas van a cambiar", "él, en el fondo, es bueno", "yo le puedo ayudar a cambiar", "estaré a su lado", "el amor lo puede todo", son frases conocidas para muchísimas mujeres. Nos han enseñado que la mujer ha de sacrificarse siempre, lo hemos visto en nuestras familias, en nuestro entorno. Todavía muchísimas mujeres creen que así es como funciona el amor.

Algunos de las consecuencias que la violencia deja en las victimas pueden ser.

Efectos no mortales:

Salud  deficiente, discapacidad, obesidad, síndromes dolorosos crónicos,   trastornos gastrointestinales, ej. Dolores permanente de estomago, ulceras, dolores de cabeza etc.

Salud mental:

Estrés postraumático, depresión, angustia, estados de pánico, trastornos de alimentación, disfunción sexual, escasa auto-estima, abuso de sustancias  ejemplo alcohol  

Comportamientos autodestructivos:

Tabaquismo, abuso de alcohol y drogas, comportamientos sexuales disfuncionales,  inactividad física,  comer en exceso etc.

En salud reproductiva:

Embarazo no deseado, trastornos ginecológicos, abortos, complicaciones del embarazo tales como bajo peso al nacer.

Algunas consecuencias de la violencia extrema puede llegar al…………….

Femicidio:

Es asesinato de la mujer por el sólo hecho de serlo, es decir, su origen se basa en las relaciones desiguales de poder entre los hombres y las mujeres y puede darse en espacios privados o públicos

Tipos de femicidio:

A) femicidio íntimo: comprende los asesinatos cometidos por hombres con quien la víctima tenía o tuvo una relación íntima, ya sea familiar, de convivencia, relación amorosa u otras afines. Este tipo de femicidio es el más frecuente y como delito se categoriza como homicidio, parricidio e infanticidio.

B) femicidio no íntimo: son los asesinatos cometidos por hombres donde la víctima nunca tuvo alguna relación o vínculo con el femicida.

C) femicidio por conexión: se refiere a las mujeres que fueron asesinadas al defender a una mujer que está siendo atacada por un hombre.

¿Cuales son los efectos en la familia?.

La familia también vive las consecuencias de la violencia al interior de la pareja. Además de la tensión, el dolor de ver a sus seres queridos hacerse daño, y el tener que muchas veces tomar partido por uno o por otro, son las cosas que más afectan a los niños u otras personas que conforman la familia, los niños que viven en hogares violentos tienen dificultades para relacionarse con otros niños y hacer amigos, tienden a bajar su rendimiento o a tener problemas de conducta, suelen ser agresivos y a demostrar su rabia (que a diario viven en sus hogares) en todas partes.

La violencia conyugal tiene además un efecto de repetición en las generaciones siguientes. De hecho el 95% de los agresores y agredidos provienen de hogares en que los padres vivían una relación de violencia intrafamiliar. Por eso es muy probable que los niños que crezcan siendo observadores de violencia en la pareja vivan cuando adultos violencia en su relaciones.

Factores de riesgo.

La violencia que surge dentro de la familia, sea cual sea su categoría y forma, va acompañada por factores de riesgo, como por ejemplo:

Factores culturales: pérdida de valores personales y familiares, o valores equivocados como por ejemplo conducta machista. Creencias equivocadas de la sociedad con respecto a la convivencia familiar, como por ejemplo, pensar en el castigo físico cómo un método.

Factores laborales: estratos socioeconómicos deprimidos, donde los ingresos económicos no son suficientes para responder a  necesidades como: alimentación, vestuario y otros. Estratos socioeconómicos altos presentan: indiferencia,  largas jornadas de trabajo.

Factores sociales: aislamiento por parte de la victima, conceptos rígidos de comportamiento de hombres y mujeres, historia familiar del agresor, desconocimiento de las redes de apoyo.

Factores de salud mental: alcoholismo y drogadicción, estrés, deficiencias mentales, perturbaciones del sentido de la realidad.

La violencia contra las mujeres está vinculada al desequilibrio en las relaciones de poder entre los sexos en los ámbitos social, económico, religioso y político, pese a todos los esfuerzos en favor de la igualdad no se ha logrado y constituye un atentado contra el derecho a la vida, a la seguridad, a la libertad, a la dignidad y a la integridad física y psíquica de la víctima y todo ello supone, por lo tanto, un obstáculo para el desarrollo de una sociedad democrática. Por lo que debemos luchar contra los factores de riesgo y potenciar los factores protectores.

A las mujeres no les hace falta valor,  lo tienen, son capaces de parar la violencia.

La  víctima de violencia intrafamiliar debe  recordar que la mejor medida de protección es denunciar el hecho como primer paso para detenerla.

Co- construcción.

¿Cuales podrían ser los factores protectores que debemos fomentar y promover el las mujeres y sus relaciones de pareja?

Los factores individuales pueden ser entre otros el nivel educativo de la mujer, su autonomía financiera, el historial de victimización anterior, el nivel de empoderamiento, autonomía, autoestima y apoyo familiar y social.

A nivel relacional, el tipo de comunicación sana, una comunicación basada en el respeto por el otro, haber sido socializados en la equidad e igualdad de género.

Reflexionemos y pensemos en más factores que nos protegerán de la violencia…

¿CÓMO SE MANIFIESTA LA VIOLENCIA INTRAPOLOLEO?

¿CÓMO SE MANIFIESTA LA VIOLENCIA INTRAPOLOLEO?

Agresiones físicas no accidentales, de magnitud, frecuencia y características variables; otras, psicológicas, traducidas en el constante hostigamiento verbal hacia el otro, insultos, críticas, ridiculizaciones, control, celos e indiferencia, comportamientos controladores que limitan el ejercicio de los derechos de las personas; y, sexuales, que implica en forzar al otro a cualquier tipo de contacto. Actitudes como éstas son el umbral para crear relaciones insanas, enfermizas y mantener el control y el poder sobre el otro. El secreto es el peor aliado que oculta la violencia en silencio…

“CONSTRUYAMOS RELACIONES SANAS, SIN VIOLENCIA”

EN EL POLOLEO TÚ ELIGES…

1. ¿QUÉ ES POLOLEAR?

Pololear no es estar casado
Pololear no es necesariamente para terminar casados.
Los amigos respetan las relaciones de pololeo.
Los pololos respetan las relaciones de amistad.
Intimidad, compromiso y pasión, existe integrada sólo en el amor verdadero.
Respeto y admiración mutua es lo que sostiene a las parejas más firmes.
2. EL POLOLEO es la primera etapa de conocimiento recíproco e identificación de cómo somos.

3. No te dejes llevar sólo por sentimientos, pone atención a todas las señales, a las buenas, como aquellas que crean desconfianza en el futuro,

4. QUERER no es suficiente, es necesario conocer y saber quién es? cómo es, que piensa, qué carácter tiene, sus reacciones…

5. Debes saber que a medida que aumentan los grados de compromiso de la pareja, mayores son los conflictos y la posibilidad de establecer relaciones violentas, no dejes que la violencia se incorpore a tu vida.

6. Ojo con los celos: se traducen en desconfianza y sospecha permanente en el otro, sentimientos que pueden ser peligrosos, se alimentan de dudas y que en muchos casos pueden ser enfermizos y perjudican gravemente la relación de la pareja.

7. ¿ES CELOSO TU POLOLO?

Te prohíbe salir con tus amigas,
piensa que todos quieren “algo” contigo,
critica constantemente tu vestuario, o
cada vez que conversas con un hombre te interroga como si fuera un policía.
8. Los celos pueden llegar a tal grado que la persona se puede volver castrante con la pareja prohibiéndole salir, hablar con los demás, arreglarse, y aún así seguirá pensando que le es infiel, desconfiará y vigilará constantemente.

9. Los celos enfermizos llegan a provocar, en infinidad de casos, violencia física y psicológica continua.

10. Los ataques de celos son el motivo más frecuente de homicidios conyugales y un factor determinante en casi el 20% de todas las agresiones violentas en los países desarrollados

11. Las personas celosas tienen una distorsión, un pensamiento erróneo, porque por mucho que amemos a alguien, por muchos compromisos o planes en común que tengamos, NUNCA poseemos a esa persona, no es una propiedad privada.

12. “SOMOS EL UNO PARA EL OTRO”; pero: EN LAS COSAS DEL AMOR HAY QUE PONER CABEZA Y CORAZON,

13. La comunicación resulta vital en la etapa del conocimiento del otro, no basta la comunicación física, la atracción.

14. La comunicación psicológica es muy importante, conocer sus sentimientos, personalidad, manera de ser, perfil.

15. Compartir ideales y amigos es muy importante.

16. ES MUY IMPORTANTE QUE CADA UNO DE LOS POLOLOS SE SIENTA ÚNICO Y ESPECIAL PARA EL OTRO.

17. “Si nos queremos, lo demás no importa”, la verdad es que SÍ importan las peleas frecuentes y las discusiones mal resueltas, las descalificaciones, los portazos, los amurros o ley del silencio, porque en el matrimonio no se arreglan los problemas del pololeo, sino que se acentúan.

18. La libertad es esencial en la relación; hay parejas que sin “quererlo” se asfixian, mutuamente, se impiden el mantener su vida independiente. PORQUE nadie crece bajo la sombra del otro.

19. ESTAR JUNTOS Y COMPARTIR CON OTROS, ESE ES EL MISTERIO DEL POLOLEO EXITOSO. CUANDO NO ESTAMOS JUNTOS, ME GUSTA SABER QUE TE VOLVERÉ A ENCONTRAR.

RECONOCER LA VIOLENCIA ES EL PRIMER PASO.

PIDE AYUDA. FONO FAMILIA 149

30 formas de decir NO a la violencia


No más violencia en el pololeo

“Esta es una campaña de jóvenes para jóvenes, realizada desde las plataformas en las que se comunican ellos: facebook, twitter y youtube", contó la Ministra. Y agregó, "estamos apelando a los jóvenes como agentes de cambio en sus entornos de amigos y familia. Queremos que aprendan a reconocer los síntomas de la violencia a tiempo para erradicar estas prácticas cuando todavía estamos a tiempo".

Actualmente tenemos indicadores altos en violencia física y sicológica entre los jóvenes, y los estudios demuestran que ésta se va duplicando a medida que la relación se va poniendo más seria. "Por eso hemos decidido enfocar este año la Campaña de Violencia en la prevención para atacar a tiempo este mal. "Según  encuesta realizada por el Instituto Nacional de la Juventud, INJUV, en parejas entre 15 y 19 años, un 10,7% ha experimentado violencia psicológica y 4,6% violencia física. Estas cifras se duplican en relaciones de más adultas”.

El problema es que los jóvenes creen que la violencia es tema de adultos y no reconocen en sus relaciones de pareja la presencia de este grave problema. Estamos hablando de golpes, machucones, empujones o patadas. También garabatos, humillaciones, insultos, escenas de celos y control. Acciones que asusten o desestabilicen; mecanismos de control y amenaza", dijo.

El objetivo de la campaña es prevenir la violencia en las relaciones de parejas jóvenes y adolescentes y sensibilizar  a 25 mil jóvenes para que actúen como embajadores de esta campaña y, mediante diferentes acciones en terreno, promuevan el mensaje de la propuesta.


Lamentablemente, dijo la ministra, que “estas cifras se duplican en relaciones de adultos jóvenes entre 20 y 24 años,  alcanzando un 19% la violencia psicológica y un 10,4% la física. Este es el principal argumento de intervenir con jóvenes y facilitar el cambio de conducta que necesitamos como sociedad”.

Femicidios en Chile








AÑO 2008 59
AÑO 2009 55
AÑO 2010 49
AÑO 2011 40
AÑO 2012 34
AÑO 2013 40
AÑO 2014 40
AÑO 2015  7 AL 16 DE FEBRERO

Fuente: SERNAM

El maltrato

Por la Mujer

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Respetos